A las en punto partimos en dirección a Cervera.
Comenzamos la ruta con 4ºC, por sendero estrecho, con bastante agua y acompañantes.
Había safari fotográfico.
Entrada al valle y comienzo del ascenso al bosque por vía libre.
Cada uno disfrutamos del bosque y de las diversas formas y tamaños de los tejos y de las hayas así como de la belleza de las hojas caídas y de la presencia de diferentes variedades de setas.
Ascenso continuado hasta atravesar el bosque y alcanzar las vistas del valle por su cara norte y por su cara sureste.
Descenso vertiginoso en busca del bocadillo.
La lluvia nos echa pronto para alcanzar la parada inicial a tomar los coches.
Café reparador al calor de la madera en el parador nacional de Fuentes Carrionas en Cervera.